Publicado por el Movimiento Mundial de Derechos Humanos
Lima, 25 de Febrero de 2016,
Sr. Gary J. Goldberg
Presidente y CEO
Newmont Mining Corporation
Estimado Sr. Goldberg
Visita Ud. el Perú para participar en la Plenaria Inicial de la VII Conferencia Internacional de la Extractive Industries Transparency initiative (EITI) que se celebra del 22 al 25 de febrero en la ciudad de Lima.
Celebramos que exista una iniciativa como el EITI que promueve la transparencia en torno a las actividades mineras, petroleras y gasíferas, en las que tradicionalmente ha existido mucha opacidad y corrupción. Además, celebramos que una empresa minera como la Newmont sea parte de esta iniciativa y promueva su existencia y consolidación en los países en los que desarrolla sus actividades.
Sin embargo, lamentamos sinceramente y rechazamos rotundamente que -mientras Ud. inaugura un evento que promueve la transparencia en las actividades extractivas- la Empresa Minera Newmont que Ud. dirige y la Empresa Minera Buenaventura –su socia en Minera Yanacocha- según fuentes fidedignas, han violado de manera sistemática, prepotente y abusiva los derechos humanos de la Señora Máxima Acuña de Chaupe y su familia, agricultores de la Provincia de Celendín, Región Cajamarca, que ha decidido no vender sus tierras a Yanacocha pues prefieren seguir siendo pequeños productores campesinos y ha denunciado los efectos negativos en materia de derechos humanos de los proyectos mineros Yanacocha y Conga.
Siendo Ud. Presidente y CEO de la Newmont y estando Ud. de visita en Perú, seguramente habrá preparado bien su viaje y estará perfectamente enterado de este caso. Sabrá Ud. que desde hace años se reportan incidentes de hostigamiento y ataques a los derechos de esta familia por parte de la policía y del personal de seguridad de las empresas mineras Newmont y Buenaventura ; que Yanacocha actúa ignorando los protocolos internos de la Newmont y los Principios Voluntarios de Seguridad y Derechos Humanos asumidos voluntariamente por las principales empresas mineras del mundo; que la justicia peruana determinó el 17 de diciembre de 2014 que la familia Chaupe no era culpable de ocupación ilegal de la tierra , se ; y que el caso también ha sido llevado a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la Organización de los Estados Americanos (OEA), la que ha emitido una medida cautelar en favor de la Familia Chaupe el 5 de mayo de 2014.
Siendo Ud. una persona informada de lo que hace su empresa, sabrá Ud. que en las últimas semanas se denunciaron nuevos ataques a la Familia Chaupe por parte de personal de seguridad armado de las empresas mineras Newmont y Buenaventura –asociadas en Yanacocha- , inclusive cerco físico a sus terrenos impidiendo su movilidad, vigilancia desde el aire con drones violentando su intimidad, ataque físico a su mascota, destrucción de sus cultivos, etc.1
En estas circunstancias, le urgimos que tome medidas inmediatas para que cese el hostigamiento permanente a la Familia Chaupe, y que Newmont y Buenaventura colaboren de buena fe a una necesaria investigación independiente en relación con estos graves hechos, para que los responsables puedan ser denunciados y procesados.
Solo sobre la base del respeto irrestricto a los derechos humanos de las poblaciones que habitan en los territorios en donde se realizan actividades extractivas es que podemos sentar las bases de un diálogo alturado y responsable sobre el rol de la minería en estrategias socialmente inclusivas y ambientalmente sostenibles para generar el bienestar de las personas.
Sin otro particular
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