Vigilando los bichitos del agua

Una de las técnicas usadas para monitorear la calidad de nuestros ríos es midiendo la presencia de macroinvertebrados bentónicos, esto es, gusanos, larvas y otros bichitos que son indicio de la mayor o menor calidad de nuestra agua. Algunos de estos bichitos se adaptan a vivir en aguas profundamente turbias y contaminadas mientras que otros, más exquisitos, necesitan de aguas extremadamente limpias para sobrevivir. El hecho de que estos últimos estén presentes en un río implica, pues, que las aguas son de buena calidad y, por tanto, aptas para consumo humano y de animales.

En este vídeo, mostramos cómo las comunidades aprenden a controlar la calidad de sus ríos con la técnica de los macroinvertebrados bentónicos. Sin duda, se trata de una iniciativa que coloca a la ciudadanía como máxima protagonista en el cuidado de sus más valiosos bienes naturales.

Desde Grufides, abogamos por el reconocimiento a nivel de ley del monitoreo de calidad de agua con macroinvertebrados bentónicos. Esta técnica es fácil de implementar en las comunidades, dotándolas de autonomía para monitorear la calidad de sus aguas. Además, se trata de un método fiable, barato y sencillo de aprender e implementar. Contar con estos monitoreos, realizados de manera periódica sobre las mismas aguas, es una salvaguarda porque demuestran el estado en el que se encontraba el bien antes y después de una determinada acción que pueda ser causa de contaminación.